Cuando estamos elaborando un trabajo académico se incluyen las fuentes que hemos consultado, pero ¿qué sucede cuando encontramos una autoría dentro del trabajo que estamos consultando?
La recomendación es que acudamos a leer esta fuente primaria, que seguro incluye aspectos interesantes no incluidos, pero pensemos que no la hemos encontrado.
La citación es lo que llamamos fuente secundaria. Tenemos dos opciones en este caso:
1. Esta opción es cuando reproducimos literalmente una frase o párrafo y contiene una autoría, en este caso incluimos la cita literal con referencia a la página que estamos y la fuente secundaria ni se menciona.
Estamos leyendo (A):
Arteaga-Martínez, B., y Arnal-Palacián, M. (2022). Análisis del conocimiento especializado en matemáticas con maestros en formación: una experiencia con la representación de fracciones. Educatio Siglo XXI, 40(1), 107–130. https://doi.org/10.6018/educatio.436461
Y nos interesa esta frase:
"Duval (1998) indica que para comprender un concepto es necesario la coordinación entre diferentes sistemas de representación, ya que uno solo no permite la comprensión total de concepto", que está en la página 114.
Incluiremos en el listado de referencias la fuente original de (A), y en el cuerpo pondremos:
"Duval (1998) indica que para comprender un concepto es necesario la coordinación entre diferentes sistemas de representación, ya que uno solo no permite la comprensión total de concepto" (Arteaga-Martínez y Arnal-Palacián, 2022, p. 114).
2. Cuando no es una cita literal sino que la extraemos, tendríamos por ejemplo:
Duval (1998, citado en Arteaga-Martínez y Arnal-Palacián, 2022) señala un único sistema de representación no facilita la comprensión total, sino que conviene el uso de varios sistemas.
Y en el listado incluiríamos (A) también.
